Robert Prevost ha saludado a los fieles reunidos en la plaza San Pedro y ha lanzado sus primeros mensajes como papa León XIV. En su intervención no sólo ha hecho un sentido reconocimiento a su antecesor, el papa Francisco, sino que ha dejado claro que quiere “una iglesia misionera”, que “tienda puentes”, abierta “al diálogo y al amor”.
Recordó la última intervención pública de Francisco que “con voz débil, pero siempre valiente, bendijo a Roma, dio su bendición al mundo la mañana del día de Pascua”, poco antes de morir. “Seguid esa bendición, dijo que Dios nos quiere a todos. El mal no prevalecerá”. “Ayudadnos a construir puentes mediante el diálogo uniéndonos en un único pueblo en paz”, añadió. Y dió “gracias al papa Francisco”.
En su intervención tuvo palabras para los 132 cardenales que lo han elegido Papa y se comprometió a “caminar junto a vosotros buscando la paz y la justicia”. “Soy un hijo de san Agustín, agustiano, que dijo 'con vosotros soy cristiano'. Podemos caminar todos juntos hacia la patria que nos ha preparado Dios”.
Lanzó asimismo un saludo especial a la Iglesia de Roma: “Juntos tenemos que ser una iglesia misionera, que construya puentes, de diálogo, dispuesta a recibir, con los brazos abiertos”.
Y en castellano, se dirigió a su “querida diócesis de Chiclayo”, en Perú, donde estuvo del 2015 al 2023, y que definió como “un pueblo fiel que ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto para ser fiel a Jesucristo”.
El mensaje que quiso lanzar el nuevo Para quedó concentrado en sus últimas palabras: “Queremos ser una iglesia que camina, que busca la paz, la caridad, estar cerca de los que sufren”.